martes, 20 de agosto de 2019

REFLEXIONES (Javier de la Iglesia)

A cada día que pasa más me afirmo en la idea de que los seres humanos somos ridículos en demasía. Y si, hoy quiero reflexionar y compartirlo con quien quiera leer este relato. Estoy seguro que me ganaré miles de enemigos porque últimamente si no se es políticamente correcto o no se dice lo que se quiere escuchar te ganas un buen puñado de detractores que dicen de ti palabras como retrógrado, raro o loco. Aun así, voy a seguir dando hoy rienda suelta a mis reflexiones políticamente incorrectas. Hoy tengo el filtro atascado. Hoy toca protestar.

Protestar: es el verbo que más utilizamos en la sociedad actual. ¿Hay algo por lo que no protestemos? Lo hacemos por hacer y es curioso. Protestamos porque algo se implantó y luego volvemos a protestar porque se retira lo que se impuso. Eso mismo por lo que nos habíamos quejado cuando se instauró. Debe ser que no tenemos cosas por las que realmente protestar y lo hacemos por tonterías supinas. Problemas del primer mundo. Me resulta más que ridículo, es realmente un poco asqueroso. Oír gente que se queja por estar agobiada al tener que hacer un esfuerzo en pensar como combinarse la ropa por la mañana para ir a clases de zumba, pilates o yoga y agobiarse por no tener horas libres, porque después de salir de estas actividades tienen que irse corriendo al gimnasio. Y lo más curioso es que luego tienen cita con el masajista para deshacer la contractura que se formó haciendo mal la tabla de ejercicios. Claro, como te vas a concentrar bien en los ejercicios si se está más pendiente de ver si estoy perfectamente combinado de ropa mientras estoy en la bicicleta estática mirando cual es la marca de ropa deportiva del compañero de al lado para mañana yo traer también una marca al mismo nivel económico. Bendito postureo (y hablo de casos reales, no me lo estoy imaginando)
Cierto es que esto es un verdadero problema comparado a los problemas del tercer mundo donde un niño tiene que andar treinta kilómetros para ir algún (y solo algún) día al colegio y luego otros veinte para conseguir un cubo de agua (estoy siendo irónico por si no se aprecia el tono) Y lo más curioso: que estos niños se quejan mucho menos que nosotros. En fin. Es realmente escandaloso como dice la conocida canción.

Y hablando de escándalo, escandalizar es otro verbo que también está en auge. ¿Qué es lo que pasa últimamente con la moral en el mundo? ¿Soy yo que necesito gafas por ver doble? Doble moral es lo que se aprecia en la sociedad unida al verbo protestar anteriormente citado. Uno de los países donde más porno se consume, pero no podemos ver un busto desnudo o un pecho al aire. Escenas censuradas en películas son el ejemplo. O nos escandaliza también ver una mujer desnuda en un camión, pero no nos importa que cierta marca chic de perfumes muestre a un varón y una mujer desnudos, en plena actitud sexual copulativa y se corta justo cuando la chica empieza a bajarle el calzoncillo al chico. Si, solo un calzoncillo es la única prenda de ropa que se usa para el spot publicitario. Por delante vaya que no estoy de acuerdo con esas imágenes de mujeres desnudas en la cabina de un camión o cualquier otro lugar de forma decorativa, me parece de un mal gusto tremendo y arcaico, tan de mal gusto como los anuncios de colonias con gente desnuda. ¿Porque molesta en un lado si y en otro no cuando en ninguno de los dos deberíamos usar el desnudo, ni masculino ni femenino, para llamar la atención sobre algo? Aunque por otro lado tampoco sé porque escandaliza y suscita tanta crítica y repulsión ver a una persona sin ropa. Repito, el porno se consume por toneladas. Nos escandaliza ver un pecho o unos genitales, pero no nos escandaliza cuando vemos en las noticias que unos jóvenes se pelean y dejan a un chico en coma pegándole una patada en la cabeza, niños de trece años que llegan a urgencias con comas etílicos, que la gente se tirotee o se destroce gran parte del mobiliario urbano durante peleas entre distintos seguidores de ciertos equipos de fútbol. Será que esto es normal (Vuelvo a ser irónico) Penoso es llegar a la situación de que gente se suicide porque vídeos íntimos circulen por las redes, y lo más penoso de esto es que alguien no se dé cuenta de que no tiene nada de malo y si un vídeo así llega a nuestras manos no debería llamarnos tanto la atención para pasarlo de unos a otros. ¿Es que somos tan infantiles como para no dar borrado el vídeo sin darle mayor importancia ni compartirlo con nadie? La respuesta a esta pregunta me causa tristeza. Y lo más llamativo de todo es que ni el más pintado se libra de hacer lo que se ve en un vídeo de estas características. ¡Pareciera que estamos locos!
Realmente si lo parece. Nos paramos a pensarlo y pareciera que somos una sociedad totalmente trastornada. Gente por la calle hablando sola hasta que te das cuenta de que un pinganillo está en su oreja. Vamos por la calle hablando por el móvil sin ponerlo en la oreja. Lo último es ponerlo a la altura de la boca y a veces hasta oímos los transeúntes la voz del interlocutor al otro lado. Un día me explicaron que era porque el brazo se cansaba menos. Y digo yo: ¿es que tenemos la boca a metro y medio de la oreja? Lo entendería si la boca estuviese a la altura de la cadera, pero de la boca a la oreja el ángulo que forma el codo es casi exactamente igual. ¿Alguien me puede explicar la diferencia? Y si no vamos hablando, vamos escribiendo sin mirar por donde andamos. Que aparten los demás que la acera es mía. ¿Pero como se puede ir así? Esta misma pregunta me la hice yo mismo un día que iba contestando a un mensaje de WhatsApp por la acera y cuando me di cuenta me pegué con una señal al no mirar al frente. ¡Santo Tomás, una vez y nada más! Que tengo que contestar: paro y escribo o contesto más tarde. Y ya no solo contestar a un mensaje. La mayoría de la gente aprovecha el ir andando por la calle para mirar Facebook, Instagram, twitter, etc… y pienso yo: es muy común el comentario de la típica vecina del visillo que esta todo el día cotilleando a ver quién viene y quien va o los cuatro vecinos que salen a las ventanas en formato radio patio. A ver. El antiguo visillo pasó a llamarse Facebook en la actualidad. Porque a mí que alguien me explique si las redes sociales no se convirtieron en un arma de cotilleo y postureo. Y más allá de eso en un arma antisocial. ¿Quién me puede explicar cómo se relaciona la gente hoy en día o se liga sin necesidad de quedar previamente a través de una red social? ¿Soy yo al único que le resulta tristemente ridículo ver a tres personas en la misma mesa tomando un café y las tres absortas en sendos teléfonos móviles? No sé. A lo mejor tiene razón la gente que me llama antiguo o me dice que vivo en la era cuaternaria por solo usar la red social WhatsApp y no disponer de ninguna otra. Vale. Respeto todas las opiniones, pero muchas de ellas no las comparto. Dije que hoy no iba a ser políticamente correcto.
Puede ser que yo será exagerado o naciera en la época equivocada. Que tengan razón los que dicen que soy rarito por decir que las tecnologías siempre se usan exageradamente mal en muchos casos. No lo sé. Solo sé que prefiero un mundo gobernado por personas y no por máquinas. Pero yo me formulo una pregunta ante todos estos que dicen que las tecnologías nos hacen una sociedad avanzada y moderna: realmente como sociedad ¿estamos avanzando o involucionando?
Quizás sea yo un antiguo.

2 comentarios:

  1. Querido Javier, leo con calma tus reflexiones y no puedo sino estar de acuerdo con ellas. Te preocupa la pérdida de valores, la miopía con que vemos nuestro entorno, la degradación de las relaciones personales bajo la vertiente externalizadora del postureo. La omnipresente sexualización como arma publicitaria, el creciente y despiadado acoso digital ...etc Y a quién no?. Reconoces q tu mismo te dejabas llevar por la tiranía del móvil, así como sin querer, engullido por esa pequeña adicción doméstica q nos afecta a todos. Sin embargo tus palabras reflejan un punto de inflexión importante “ Paro y escribo, o contesto más tarde” . Decidir, imponerse es una necesidad, es crear un reducto en el q ser uno mismo.
    Que la red es predatoria lo sabemos todos, el propio nombre lo advierte, sin embargo no es posible permanecer fuera del agua si uno quiere aprender a nadar. El mundo analógico tiene fecha de caducidad, pertenecemos a una generación q ha de aprender destrezas no sólo técnucas sino tb emocionales porq nacimos en un mundo diferente a este. Y en esas estamos, aunq reconozco q a veces pareciera q damos brazadas en el fango y q más q avanzar nos hundimos. Quiero creer q la evolución y la involución van parejas en la historia, q la vida misma no es lineal y q a veces retrocedemos xq eso nos permite comprender.
    Ni raro, ni antiguo, todo aquel q como tú intenta estructura sus sentimientos e ideas a través de la escritura crea espacios para la reflexión. Crea espacios de pausa de los q el mundo está tan necesitado. No dejes de hacerlo. 😘

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por tus palabras y tus también reflexiones Ángeles. A lo mejor yo soy un poco radical con mis ideas en algunos aspectos, lo reconozco. Y es que este tema da para debatir horas oyendo todos los puntos de vista de diferentes personas y respetandolos todos claro está. Es interesante. Muchas gracias por aportar tu punto de vista repecto a la temática del relato. Es lo bueno de este blog. Que ademas de exponer los frutos de nuestra aficción escritora podemos opinar e incluso debatir sobre ellos. Mil gracias.

      Eliminar